SEMANA EUROPEA PARA LA PREVENCIÓN DE RESIDUOS
El sábado 21 de noviembre comenzó una nueva edición de la Semana Europea para la Prevención de Residuos (EWWR), durante la que se están llevando a cabo más de 10.600 acciones relacionadas con la reducción de residuos, la reutilización de productos, el reciclado de materiales, así como la limpieza en 32 países de Europa y también de fuera del continente.
Esta es una de las principales campañas internacionales para promover la reducción de los residuos mediante acciones de sensibilización organizadas durante una sola semana de noviembre. El objetivo de estas acciones es cambiar el comportamiento en torno a los patrones de consumo y los hábitos de generación de residuos para alcanzar los objetivos en materia de residuos y clima.
Los participantes pueden ser escuelas, administraciones públicas, empresas, ONG y particulares. La EWWR los reúne para tomar medidas a diferentes niveles: local, regional, nacional e internacional.
Entre sus objetivos están:
• Sensibilizar sobre la reducción de residuos, la reutilización de productos y las estrategias de reciclaje de materiales, y las políticas relacionadas de la Unión Europea y los Estados miembros
• Movilizar y animar a la ciudadanía europea a concentrarse en cuatro temas de acción clave
• Reforzar las capacidades de las partes interesadas de la EWWR proporcionándoles herramientas de comunicación y formación específicas.
El mensaje: las 3R
Las acciones llevadas a cabo en el marco de la EWWR abordan las 3R: Reducción de residuos, Reutilización de productos, Reciclaje de materiales, en este orden. Estas son las principales R (aunque hay muchas otras) a tener en cuenta a la hora de reevaluar los hábitos de consumo.
No es casualidad que las 3R estén en lo más alto de la jerarquía de residuos. En la práctica, dichos niveles nos pueden informar acerca de las decisiones personales (u organizativas) a tomar:
Reducir: preguntándonos si realmente necesitamos los productos que consumimos antes de comprarlos. Eso también se aplica al envasado en el que vienen algunos productos. ¿Quizás puedo reutilizar cosas o pedir prestado a un/a amigo/a o arreglar objetos rotos o compartir las herramientas de algún vecino/a? Si la respuesta es sí, entonces puede, y debe, REDUCIR.
Reutilización: esta es la parte en la que las personas consumidoras podemos realmente marcar la diferencia. ¡Cambiemos los artículos de un solo uso por otros reutilizables! Ese es el caso no solo del plástico, sino de todos los demás artículos y productos de un solo uso. Convence al resto, familia, amigos/as o vecinos/as, compañeros/as de trabajo, para que hagan lo mismo.
Reciclaje: es mejor que el vertido en vertederos, pero no es la mejor opción. Ya que, si necesitamos reciclar algo, significa que ya estamos generando desechos. Si nos tomamos en serio la reutilización y la reducción, el reciclaje solo debe constituir una pequeña parte de nuestros esfuerzos.
Let's Clean Up Europe
La EWWR anima a organizar acciones de limpieza en los países europeos y en aquellas áreas donde la basura está impidiendo el buen funcionamiento de los hábitats naturales y humanos.
Ediciones temáticas
Cada año, la EWWR se enfoca en un aspecto diferente de la prevención de residuos con el fin de llamar la atención sobre áreas de alto impacto relacionadas con nuestros hábitos de consumo insostenible como sociedad.
Tema 2020: RESIDUOS INVISIBLES
Para esta 12ª edición, el tema elegido es el de los residuos invisibles, es decir, aquellos que están fuera de la vista de la mayoría de nosotros porque se generan durante la fabricación de los productos.
¿Sabías que para fabricar un teléfono inteligente que pesa menos de 200 gramos y viene en un paquete pequeño, se producen 86 kilogramos de desechos? Una gran parte de los residuos invisibles no se pueden reciclar y terminan en vertederos e incineradores. Junto con la huella de residuos también viene el impacto del CO2 generado y un elevado costo para el clima. Para una producción y consumo sostenibles, los productos deben tener una vida útil más larga, ser más fáciles de reparar y reciclar y, en última instancia, no ser tóxicos. El aumento de la vida útil del producto reduce la necesidad de nueva producción y, por lo tanto, la cantidad de residuos producidos durante la fabricación.
¿Qué puedo hacer al respecto?
Hacer visible este desperdicio para poder tomar decisiones informadas al elegir qué producto comprar y asumir la responsabilidad de nuestra huella. Productores, consumidores, tomadores de decisiones, todos podemos tomar medidas para reducir los residuos invisibles. Prolongar la vida útil de los productos mediante la reutilización y reparación, comprar de segunda mano, alquilar y compartir productos en lugar de poseerlos, obtener una etiqueta ecológica y unirse a esquemas de responsabilidad del productor, etc.
Enlaces web con herramientas y materiales:
https://ewwr.eu/project/
¡El mejor desperdicio es el que no se produce!